
Guillermo Acuña
MI HISTORIA
Después de una intervención en el ojo, Guillermo ha aprendido a convivir con su enfermedad renegando de las terapias convencionales que invaden el cuerpo y destruyen masivamente las células. Su testimonio da fe de que a veces los tratamientos más efectivos em- piezan por un despertar interior.
TIPS
1. Hágalo usted mismo:
Categoría: Otros
“Trata de entender tú mismo lo que tienes, no endosarle esa responsabilidad a otros. Entender cuál es tu problema, por qué se generó, en qué etapa estás, cómo crees que te puedes salvar”.
2. Dime qué comes:
Categoría: Alimentación
“Se supone que los ojos están relacionados con el hígado y que el melanoma es síntoma de que un órgano está funcionando mal en tu cuerpo. Si mi melanoma tiene que ver con el hígado y con la piel, me parece razonable pensar que la alimentación jugó un papel importante en su aparición y –ahora que lo he superado– en su no proliferación. Es pura química, por eso creo que comer sano ayuda mucho a prevenir y a mejorar”.
3. El peligro de las expectativas:
Categoría: Otros
“Los tratamientos invasivos te ponen en la disyuntiva de la expectativa de sobrevida, sus porcentajes y probabilidades. Cuando vives el día a día, en cambio, se elimina la variable de las expectativas”.
4. Cuestión de disciplina:
Categoría: Otros
“Hago ciertas cosas, como ir una vez al mes a que me hagan masajes de balance o alineación. También me he ayudado con la musicoterapia. Ambas terapias ayudan a reorganizar los canales de energía corporal y a sentirte calibrado. Son para recordar que cada cierto tiempo hay que volver a poner límites, algo para lo que se necesita mucha disciplina y convicción”.
5.. Estrategia personal:
Categoría: Estilo de vida
“He optado por no rodearme mucho de gente con cáncer. Entiendo lo egoísta que suena decirlo así, pero es que he sufrido tanto cuando una persona cercana se muere que ya no me acerco”.