
María Isabel Orpinas
MI HISTORIA
Hace dieciséis años, un brusco melanoma marcó el inicio de la experiencia de María Isabel con el cáncer de piel. Tenía 42 años y seis meses antes su padre había fallecido de un cáncer de pulmón. En 2015 se cumplieron quince años de su operación y hoy se considera completamente sana. La prueba fue superada.
TIPS
1. Un cambio de perspectiva:
Categoría: Estilo de vida
“No fue un vuelco completo en mi vida, porque después de la operación no fui sometida a los tratamientos invasivos asociados al cáncer, pero empecé a mirarla desde otra perspectiva. Soy Trabajólica neurótica, estoy encima resolviéndolo todo. A partir de ahí me convencí de que nadie es indispensable, así es que ahora se puede caer el mundo a mi lado y yo me quedo tranquila”.
2. Actividades que sirvieron:
Categoría: Otros
“Me recomendaron yoga y lo practiqué un tiempo en un centro de meditación. También me puse a pintar, pasaba un día entero a la semana en un taller en Buin en el medio del campo. En el fondo, son cosas que uno hace para no estar pensando todo el tiempo en el cáncer y para relajarse”
3. La actitud es todo:
Categoría: Estilo de vida
“Hay que tener mucha fe y tratar de salir adelante. Nunca pensé que serían mis últimos días, yo seguí haciendo mi vida, aunque más asustada que antes. Cuando el cáncer se descubre a tiempo, siempre hay posibilidades. Lo más importante fue que nunca sentí que estaba enferma. Pensé esto no puede estar pasándome a mí. Seguí haciendo mi vida como si no ocurriera nada, tenía mellizos de 8 años y pensaba Dios, me tienes que ayudar, no puedo dejarlos solos todavía. Y así he seguido cada día de mi vida, dándole las gracias”.